Desde el 3 de febrero estoy sin internet. La razón? Nos cambiamos de casa y nuevamente quedamos a merced del monopolio de los señores Telefónica. Para nuestra desgracia, tanto en la casa que teníamos en Cerro Alegre como ahora, el único proveedor del sector es Telefónica, por lo que no tengo posibilidad de elegir (estoy a la espera que Manquehue me llame para decirme que tampoco pueden).
Además, estoy condenada a internet pues trabajo desde mi casa y es imposible para mi no tener conexión. Y ocurre que llevo 11 dias sin poder acceder desde mi casa a la gran red.
Como titular de la cuenta hice todo lo necesario. Llamé para averiguar plazos de instalación, calculé fechas para no quedarnos sin conexión e hice la solicitud esperando que todo funcionara a la altura de una empresa que lleva largo rato en este rubro. Sin embargo nada de esa planificación sirvió. Hasta el día de hoy mi línea sigue sin funcionar.
¿Cuáles han sido las respuestas de la compañía? Que todo está dentro de los plazos establecidos. Les ha dado lo mismo que la instalación que hicieron recién el lunes 11 aún no funcione. Tampoco tomaron en cuenta que pedimos término de contrato el sábado 9 (proceso que demora 10 días hábiles desde que el cliente se acerca a la compañía a devolver los aparatos entregados!) y llegaron a instalar igual el día lunes.
Jamás activaron el servicio banda ancha. Jamás realizaron la modificación de velocidad solicitada el día 23 de enero.
Es más, ayer en la tarde, mientras esperaba que un segundo técnico llegara a hacer la instalación de los servicios como corresponde, el teléfono de nuestra casa dejó de tener tono.
He llamado cada día desde el 4 de febrero solicitando explicaciones y aún no logro ingresar ni siquiera un reclamo que dé cuenta de la situación que nos afecta, pues “el proceso de traslado aún no está cerrado”. Con esa respuesta se han excusado todos estos días.
Pero tienen excusas mejores. Como el ejecutivo de la plataforma comercial del 107 hoy. “Es que señora Andrea, no podemos influir en el trabajo que realizan los técnicos, pues son servicios externalizados” para luego, sugerirme que reclame a SUBTEL.
Tuve que contactar yo, personalmente, a la empresa externa quien lógicamente hizo uso de su derecho de lavarse las manos y aún no encuentro una respuesta satisfactoria.
Mi pregunta es, ¿quién demonios responde entonces?
Telefónica no es una mini empresa. Al contrario, es una multinacional por donde se la mire. ¿Cómo deja en manos de los técnicos externalizados la calidad del servicio? Lógicamente, a esta altura todo me huele a excusa.
Lo peor de todo es que si Manquehue no puede darnos conexión cualquier alegato con Telefónica será inútil. Saben de la condición monopólica que tienen. En Cerro Alegre lo entendía perfectamente, porque vivíamos en la punta del cerro. Pero, ahora, que es el centro de la ciudad, de verdad no lo entiendo.
Este post está escrito desordenado. Lo sé. Pero estoy tan enojada que no logro ordenar las ideas, ni los pasos que he seguido en diez días de reclamos. Seguramente ya perdí la mitad de los números de reportes, confundí los nombres de las personas con las que he hablado y aún no tengo claro qué paso sigue en todo esto.
La fotografía de este post la encontré en el flickr de WalteR Funk
Es una reverenda lata, no hay caso, creo que las grandes empresas no respetan como debieran a sus cliente, cero conciencia, creen que nos hacen un favor a vendernos un servicio/producto.
Peor telefonica y su monopolio en algunos lugares